La halitosis, también conocida como ”mal aliento”, es un trastorno más habitual de lo que pensamos y puede acarrearnos problemas de índole social y profesional.
La conciencia de padecer mal aliento tiene consecuencias psicológicas en los enfermos. Much@s de las personas que padecen esta patología se cubren la boca al hablar, intentan mantener una mayor distancia interpersonal o, incluso, evitar las relaciones sociales.
La halitosis se divide en varios tipos; genuina, persistente, transitoria e imaginaria. La más grave es la persistente ya que no se soluciona con los habituales métodos de higiene y requiere un tratamiento específico.
Sin embargo, la genuina y la transitoria podemos controlarla, en principio, con unos hábitos de higiene adecuados y siguiendo una serie de consejos. ¿Quieres saber cuáles? Sigue leyendo que te los contamos.
Actualmente existen más de 80 causas reconocidas del mal aliento o halitosis.
El 90% del origen de los casos de halitosis lo encontramos en la boca, por enfermedades de las encías, acumulación de bacterias en la lengua o por otro tipo de patologías como las caries.
Mientras que el 10% restante se debe a enfermedades de otra índole como infecciones respiratorias y de las amígdalas, problemas sinusales, diabetes o problemas del hígado o el riñón.
Como te hemos dicho, la mayoría de los casos comienzan en la boca por lo que algunas de las causas las encontramos en:
Para la prevención y el tratamiento de la halitosis es necesario mantener una buena higiene bucal. Con un cepillado de, al menos, 2 veces al día o tras las comidas. Este cepillado se debe completar con la higiene interproximal.
¿Qué es la limpieza interproximal? La limpieza interproximal es aquella que realizamos entre los dientes, en el espacio que existe por debajo del punto o área de contacto de los dientes y que generalmente es ocupado por la encía. La llevamos a cabo con sedas dentales, cepillos interproximales y/o irrigadores
La lengua es, muchas veces, la gran olvidada en la limpieza bucal. Pero resulta muy importante que tengamos una buena higiene lingual de forma diaria. Y es muy aconsejable que se realice con un limpiador lingual.
Además de una buena higiene bucal para mejorar y obtener un buen aliento es importante seguir una serie de recomendaciones como beber agua con frecuencia, evitar ayunos, sobre todo si son prolongados. Reducir el consumo de ciertos alimentos como la cebolla o el ajo es otra de las buenas prácticas que podemos seguir y moderar el consumo de café, alcohol y tabaco.
¿Tienes dudas? ¿Crees que puedes padecer halitosis? Ven a visitarnos o llámanos
Estamos en Ronda de Migjorn, 12, 07620 Llucmajor, Illes Balears.
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