En Clínica Obrador buscamos la mejor experiencia y las últimas alternativas en rejuvenecimiento facial, entre ellas un procedimiento sencillo y con unos resultados prácticamente visibles de forma inmediata, nos referimos a los efectos de la aplicación de Botox.
El tratamiento con la toxina botulímica, es una de las técnicas estéticas más empleada por reconocidos especialistas de medicina estética sin recurrir a la cirugía, actúa reduciendo la contracción de los músculos faciales donde se coloca. Al reducir su contracción, conseguimos suavizar las arrugas de expresión.
Con Botox podemos subir cejas caídas, feminizar cejas muy duras, y modular la forma de cejas desequilibradas. En definitiva, podemos conseguir muchos de los objetivos que se pueden conseguir con una cirugía como el lifting frontal pero de forma menos invasiva.
Sencilla técnica de aplicación
Consiste en aplicar un fármaco mediante inyecciones con agujas realmente muy finas por lo que es imperceptible e indolora su aplicación. El resultado se puede ver en pocos días, una piel más lisa, un aspecto más dulce, y sobre todo, una significativa reducción de las líneas de expresión.
Beneficios del Botox
Un tratamiento bien realizado tiene como objetivo mejorar la forma de las cejas, mejorando la mirada, reducirá las arrugas frontales, las del entrecejo, y las patas de gallo, nos dará un aspecto descansado, pero sin perder la posibilidad de expresar nuestras emociones. En definitiva, se debe tener en cuenta la mirada de forma global para conseguir resultados naturales.
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